Nos encanta Sanxenxo. No perdemos ocasión de ir aparentar a la Marbella gallega. El pasado fin de semana estuvimos en el Hotel Oca Vermar, un tres estrellas que merecería la cuarta estrella, e incluso una quinta estrella si nos ponemos generosos.
Mi marido quedó impresionado con el hotel. Había hecho yo la reserva. Por eso no estaba muy convencido. Siempre se queja de que elijo hoteles baratos. A mi santo le gusta lo mejor de lo mejor, es decir, lo más caro de lo más caro. Cuando llegamos a este hotel que está entre Sanxenxo y la península de O Grove cambió de opinión.
El Hotel Oca Vermar cuenta con 44 habitaciones que consiguen que te olvides de tu casa. Nuestras habitaciones tenían vistas a la piscina del hotel. La de las niñas era más luminosa. La nuestra tenía una luz tenue que consiguió que mi santo y yo nos enamoráramos más. Me gustaron los cuartos de baño. Los secadores de pelo funcionaban mejor que los míos en casa. Las toallas se veían limpias. Las duchas eran ideales para dejarte aseada y relajada. La misma limpieza minuciosa encontrabas en los dormitorios. Le saqué partido al despacho. Coloqué mi ordenador portátil y trabajé durante horas. Tenía mucho trabajo online pendiente. Mis hijas se entretuvieron con la tv vía satélite. En la nevera pudimos guardar alguna bebida que compramos así como la comida para llevar que se agenció mi santo en un bar de las proximidades.
Os recomiendo este hotel. Es barato. Ten en cuenta que la conexión wi fi es gratuita. Un dinerito que te ahorras. Por el parking tampoco te cobran. Otro dinerito que te ahorras. Si a esto le sumas las buenas vistas y una buena piscina, te sientes en el paraíso gallego.
Seguro que volvemos. Estos días está tirado de precio. Te hacen un descuento del 45%. Necesitan salir de la crisis multiplicando los euros. Tomemos nota. Al viajar estamos ayudando a la Hostelería a mantener empleos.