El Hotel NH Alicante sería perfecto si no admitiera mascotas. Nosotros estuvimos alojados tres días y casi nos volvemos locos. En la habitación contigua había una señora con dos perros y dos habitaciones más adelante una pareja mayor se alojaba con un par de gatos. Todo el pasillo olía como un Zoo. Comprendo que los responsables de este hotel admitan mascotas para ganar más dinero. Por cada mascota cobran 25 euros por día. Deberían comprender que hay personas a las que no nos gusta que nos despierten los ladridos y maullidos. Tampoco nos gusta el olor perruno.
Lo curioso es que este hotel es cien por cien libre de humos. No se puede fumar, cosa que me parece bien, pero se puede dormir con dos perros. Por mucho que limpien esa habitación siempre queda el olor a perro.
Las habitaciones del Hotel NH Alicante son amplias, luminosas, tienen una decoración muy de hotel y un cuarto de baño también muy de hotel cuatro estrellas. Lo mejor es la terraza de la azotea. Las vistas son maravillosas. Me senté al lado de la piscina y me relajé un rato. La piscina es pequeña. No puede ser gran cosa estando en lo alto del edificio. A mi marido no le hacen ninguna gracia las piscinas en las azoteas. Piensa que se va a venir todo abajo. Hace bien pensarlo. Los arquitectos dibujan lo que le pagan.
Hablando de pagar, nos cobraron 15 euros por el parking. Menos mal que la wi fi era gratuita. No me hubiera gustado pagar por teletrabajar en mi habitación. Poco salimos. Casi hubiera sido mejor no haber alquilado un coche en el aeropuerto. El hotel está bien comunicado por transporte público con el centro de Alicante. El barrio residencial donde se ubica es tranquilo.
No recomiendo el NH Hotel Alicante para personas a las que no les gusten las mascotas. En el hotel abundan los perros y gatos. Parece que se ha puesto de moda viajar con la ganadería casera. Para las personas que viajan con sus mascotas, el hotel es perfecto. Los perros y gatos están en su salsa. Tienen perros vecinos para hacer una coral de ladridos que no deje dormir al personal.
Los amantes de los deportes tienen un gimnasio para ponerse en forma. Estaba hasta los topes cuando estuvimos nosotros. Lo mismo puedo decir de la sauna. Se notaba que el hotel tenía casi sus cien habitaciones ocupadas.