Los caramelos HALLS RESPIRAL nunca faltan en mi bolso en invierno. Los días de frío se agradece un caramelo que le dé alegría a la garganta. También son unos caramelos muy buenos para aclarar la voz cuando hablas y hablas por tu trabajo.
Yo empecé a tomar caramelos HALLS RESPIRAL el año que trabajé de profesora de economía en un instituto de Madrid. El frío podía con mi voz. Entre el frío y el esfuerzo de explicar las lecciones estaba a punto de pedir una baja. Los caramelos evitaron que la Seguridad Social se tuviera que hacer cargo de un gasto más por profesora fuera de combate.
Tomé los caramelos HALLS RESPIRAL en todas sus variedades: Eucaliptus Mentol, Limón y Miel. Mis caramelos HALLS RESPIRAL favoritos son los de limón. Tienen ese puntito picante del limón muy conseguido. Es una pena que tengan azúcar. Tomaría más caramelos HALLS RESPIRAL si los vendieran sin azúcares añadidos.
Estos caramelos lo que no tienen es gluten. Mi hija mayor es intolerante al gluten y puede chupar y rechupar los caramelos HALLS RESPIRAL sin problemas. El que no tengan gluten hace que estos caramelos sean ideales para regalar. Cuando veo que alguien necesita un caramelito para aclara la voz, saco de mi bolso mi bolsa de caramelos HALLS RESPIRAL de limón y le ofrezco uno. Nadie rechaza un caramelo de la marca Halls. Es una marca famosa.
Os recomiendo los caramelos HALLS RESPIRAL. Los comercializan en bolsas de 150 gramos. No son muy baratos. El precio de la bolsita de caramelos HALLS RESPIRAL es de 1,20 euros. Hay que aprovechar las ofertas que sueles encontrar en los supermercados. Yo los compré esta semana con una oferta de la segunda unidad con un 50% de descuento. La segunda bolsita me salió a 60 céntimos.
El envase es una bolsita de plástico con mucho color. La bolsita más linda es la de los caramelos HALLS RESPIRAL de limón. Me encantan los tonos amarillos. Los caramelos HALLS RESPIRAL de Eucaliptus Mentol tienen un sabor a eucalipto que tira. Parecen caramelos de medicina. Los caramelos HALLS RESPIRAL de miel son muy dulzones. Los compro a veces para mi suegra. Le encantan.
No debes abusar del consumo de estos caramelos. Yo me los tomo como si se tratase de una medicina. Cuando doy una clase, premio a mi garganta con un caramelito caramelos HALLS RESPIRAL de limón. Como mucho tomo dos caramelitos. De ahí no paso.
El tamaño también es ideal. Son caramelos chiquitines. A mí me gustan más los caramelos pequeñitos que los grandes. Tengo la sensación de que los caramelitos chiquitos son más de mayores. Te sientes adulta con uno de estos caramelos HALLS RESPIRAL en la boca.