Hay hoteles que recuerdas toda la vida. Yo recordaré toda mi vida El Villa Venecia Hotel Boutique Gourmet, situado en la localidad alicantina de Benidorm. Nunca olvidaré el miedo que me daba asomarme a la ventana de mi habitación y ver el mar a mis pies.
Ni falta hacía asomarte a la ventana. Desde la cama veía el mar. Todo era mar Mediterráneo. El ventanal de suelo a techo no te mostraba otra cosa.
La idea de alojarnos en este cinco estrellas de Benidorm fue de mi esposo. Quería darme una agradable sorpresa por nuestro aniversario. La sorpresa no fue muy agradable para mí.
Este hotel situado sobre un acantilado es muy frecuentado por los turistas extranjeros. Está entre la Playa de Levante y la Playa de Poniente, enclavado en el centro histórico del municipio de Benidorm.
Las habitaciones son bastante lujosas. Notas que estás en un cinco estrellas. Mi marido quería una suite. No fue posible porque estaban todas las suites ocupadas. Se tuvo que contentar con una habitación grande.
A mí me daba igual la suite o la habitación más modesta dentro del lujo. Estaba horrorizada con aquellas vistas hacia el abismo. Más me horrorizaba ver el hotel por fuera. Tenía la sensación de que estaba mirando un edificio que hacía equilibrios con la ley de la gravedad.
Apenas pude disfrutar las comodidades del hotel. Mi santo, en cambio, se dio la gran vida en una habitación con buen aire acondicionado, bañera de hidromasaje en el cuarto de baño y buen surtido de bebidas en el minibar.
Lo mejor fue el wi fi gratuito. Pude teletrabajar un poco y olvidarme que estaba viviendo un fin de semana sobre un acantilado de Benidorm. Por la noche le hacía más caso a la programación televisiva en la televisión LCD que a mi santo. Necesitaba otro tipo de distracciones. El amor no tenía cabida en mi cabeza ni en mi cuerpo.
Lo que sí probé fueron los cuidados de belleza. El Villa Venecia Hotel Boutique Gourmet dispone de spa con baño turco y jacuzzi, ideales relajarte un poco cuando estás estresada por el acantilado dichoso.
Mi marido intentó mejorar su bronceado natural en el solárium. Poco más bronceado consiguió. En dos días ningún solarium hace milagros. Debió haber pasado más tiempo en el gimnasio. Le hacía falta adelgazar algo.
No os recomiendo ni os dejo de recomendar este hotel cinco estrellas en un acantilado de Benidorm. Para las personas a quienes gusten las emociones fuertes es su alojamiento hotelero perfecto. Pero que preparen la cartera. No sale barato.
Debes aprovechar todo lo que te ofrecen en ocio para que te compense pagar su alto precio por noche. Por ejemplo, no te pierdas la piscina. Cuando estuvimos nosotros hacía algo de frío y nos recomendaron la piscina climatizada. Yo preferí la que tenía temperatura ambiente. No había tanta gente nadando.
La verdad es que disfruté bastante el hotel, pese a mis miedos al acantilado. Me alegró haber dejado a mis niñas con mi suegra en casa. Estaban a salvo de una tentación infantil de horribles consecuencias.
Es una pena que no hubieran construido el edificio alejado del precipicio. En este Villa Venecia saben divertir a los clientes. La buena música se disfruta de la terraza Chill Out del Villa Venecia Hotel Boutique Gourmet levanta el ánimo a los decaídos.
Mi marido va a volver al hotel dentro de unos días. Irá solo. Quiere asistir a un evento que se celebra en una de sus salas. Espero que los organizadores les paguen a los asistentes las comidas en os restaurantes del hotel. Son carísimos. Mi marido y yo sólo pudimos darnos una cena romántica la primera noche. La segunda noche cenamos unos bocadillos en la habitación. Era lo que había.